
Ambiente natural
Cité épiscopale d’Albi
Albi es una ciudad situada sobre el río Tarn, cerca de los viñedos de Gaillac, de la meseta de Cordais y del bosque de la Grésigne. La comuna está situada en el departamento del Tarn, entre la cuenca de Aquitania y el Macizo Central.
La geología del departamento presenta el aspecto de un anfiteatro de mesetas y colinas inclinadas hacia el sur-oeste; al este de Albi, las primeras mesetas de baja altitud forman los contrafuertes de los Causses. Al sudeste, montañas de tamaño medio que alcanzan los 1 300 m de altitud forman una barrera: montes de Lacaune, monte del Sidobre y la Montaña Negra. Al norte de Albi existe una meseta de baja altura denominada el Ségala.
La superficie de la ciudad es de 4 226 ha y su altitud media de 170 m. Goza de un clima templado suave en otoño, con primaveras a menudo suaves y húmedas y veranos cálidos y secos.
La temperatura media anual es de 13,1 °C, la insolación media anual es de aproximadamente 2 150 horas, lo que ofrece a la ciudad un clima meridional particularmente agradable. Hay como promedio 106 días de precipitaciones anuales.
Las temperaturas extremas registradas han sido de -20,4 °C el 16 de enero de 1985 y de 41,4 °C el 12 de agosto de 2003. La bruma es frecuente a lo largo del valle del Tarn.
La comuna no es muy afectada por vientos, con 25 días de viento como promedio anual. El viento del Austro (sur) afecta particularmente el departamento del Tarn, pero poco a Albi, a diferencia de Castres y del Sidobre, donde el viento sopla 50 días por año - y hasta 90 días en la causse de Labruguière.